jueves, 15 de junio de 2017

Graciela Aráoz

                                                         Obra de P. Picasso       
X
Una mujer llora en la cocina. Detrás
del olor a locro.
Macera la carne con limón
y con su inefable tristeza.

Las lágrimas caen en la espuma de leche
que se derrama hasta la indolencia.
El aire se vuelve tan oleoso que debería irse
y apagar el día.

En la cocina una mujer se parte viva,
se corta los dedos, desangra.
El dedo va a la boca.

El dolor está detrás
del hilo dormido que se secó en el vientre,
detrás de aquel humo que se llevó el después.
Siempre y detrás de todo

Cuando los olores se mezclan
ella destapa las cacerolas.
Es la única que se queda enjuagando el día
hasta que vuelva a ser.

Una mujer en la cocina.
Del libro Diabla, Tercera edición. 2016. edit. Último Reino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario