LA
LUNA QUE NO VINO
Y
yo la esperaba a orillas del río,
bajo
del sauce que lavaba su pelo,
y
como un remanso, sus aguas fluían;
la
luna no vino a mirarse en sus aguas
Era
la luna roja, la tan anunciada
la
más esperada, pero ella no vino ;
entre
brumas oscuras, escondió
su
figura, ella sabía porque le temía.
Sobre
sombras de montañas, huyó
de
la maldad ...estaba nerviosa …
no
quiso vestirse de rojo ...
no
quería cargar en sus hombros
argentados,
la tristezas de los que
ya
habían partido …
Esta
luna nueva, que baja hasta el río,
susurrando
amores, musitando versos,
no
quiere saber de muertes, sólo de
alegrías;
no quiere llantos, ni lágrimas
saladas,
sólo quiere oír la risa de niños
felices...
Esta
noche nueva, alejado el peligro,
vendrá
como siempre, a mirarse en
el
río, entonces hasta el viejo sauce
cantará
canciones de plata y los grillos
le
harán el coro, mientras los amantes
se
juran amores que han de alcanzar
la
eternidad, mirando con ojos
soñadores,
la luna de plata reflejada
en
el agua …
Ay,
amor mío, ayer no vino la luna de
Sangre,
pero esta noche, más que nunca
orgullosa,
hermosa, lucirá en el cielo
la
luna de plata, la de los poetas,
la
de los amantes, que buscan en ella
su
musa escondida ¡¡
La
Serena
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