LETEO-FRAGMENTO DE UN ENCADENADO
"y
cuando estoy a punto de tenerla,/me empuja a un mundo miserable/y no
bebe en mi copa del pecado."
JESUS ALBO
JESUS ALBO
Ha
bebido de la copa
de ese río del olvido,
ha clavado los ojos en otro cielo,
otro destino.
No la tendrás en tus pecados capitales
ni en la sombra angular de tu lascivia...
ella no sabe-no distingue más que penumbras
de tus caricias.
Es el viento quién la acuna
es el mar quién la retiene
la sal de su cuerpo sin memoria
el sudor de su pecho hoy extranjero.
Su mudez bramó alto
cuando te tuvo a su lado,
mordió labios con la esperanza
de que cuenta te dieras
que la extraña era ella
en tu ardoroso abrazo.
Deja que leve se pose
en otras tierras -tu infierno-
de ese río del olvido,
ha clavado los ojos en otro cielo,
otro destino.
No la tendrás en tus pecados capitales
ni en la sombra angular de tu lascivia...
ella no sabe-no distingue más que penumbras
de tus caricias.
Es el viento quién la acuna
es el mar quién la retiene
la sal de su cuerpo sin memoria
el sudor de su pecho hoy extranjero.
Su mudez bramó alto
cuando te tuvo a su lado,
mordió labios con la esperanza
de que cuenta te dieras
que la extraña era ella
en tu ardoroso abrazo.
Deja que leve se pose
en otras tierras -tu infierno-
AMAZONA-POEMA PARA LAS MUJERES EN SU DIA
Y ella galopa
su negra noche devora las horas
sobre la grupa
que sólo ella puede sitiar.
No necesita jinete que la conduzca
le nace bravío el pecho y orgulloso el
ego
en ese cabalgar.
Hipólita envidia el porte de amazona,
¡bien la querría Troya entre sus filas!
Pero ella no es de nadie
y a nada debe su vida.
Ella, que arranca de cuajo raíces de
ofensas
de un puñetazo atrapa estrellas
de un golpe oscurece soles
de un salto atrapa la luna,
esa, la que perlas al viento ríe alocada
que desnuda de voces
ella es viento y arena,
poema y prosa...
es su propia amazona.
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